Aunque para mí, el año nuevo comienza en mi cumpleaños ( 31 de octubre , festividad de Samhain en la cultura celta, día de transición entre el año que acaba y el nuevo), os cuento lo que hice este año por si os sirve de inspiración para este Fin de Año-Año Nuevo. Desde la vuelta del verano tenía un deseo tremendo de que llegara un poco de frío y el otoño 🍂 . Poco a poco, esta necesidad se fue materializando en la idea de realizar una ceremonia especial por mi cumpleaños. Finalmente lo planteé en casa y agradecí que no me tomaran por loca 🙈. Todo el mes de octubre estuve planeando la ceremonia, ideándola, diseñándola y disfrutándola con antelación, prestando atención a lo vivido y lo crecido durante el año que acababa. Cuando llegó el atardecer del 31 de octubre... Me vestí de una manera especial en tonos amarillos y marrones, con mi corona de hojas secas que previamente había recogido de los Jardines del Guadalquivir en un paseo con una amiga Preparé un altar con un centro de h
Un oficio que cuida al barrio y al medio ambiente Así teñía, así así Una pudiera pensar que ser zapatero es una profesión en peligro de extinción, pero nada más lejos de la realidad. La media de personas que entran por la puerta del taller de Pepe un sábado de 10:30 a 11:30 es de una cada 3 minutos. Unas para dejar encargos, otras para recogerlos, algunas para reclamar, y otras, simplemente, para saludar. Yo me pregunto cuándo tiene tiempo para trabajar, ya que, cuando llego, Pepe está tiñendo unos zapatos. Pasada una hora me voy y sigue tiñendo los mismos zapatos 🤷🏻♀️ En los últimos años mi creciente conciencia ecológica ha modificado muchos de mis hábitos, sobre todo los relacionados con el consumo. El exceso de productos de usar y tirar, y la escasa sostenibilidad de los materiales actuales me pide reparar y reutilizar productos que ya tengo. Y así fue como conocí a Pepe,